
Frecuentemente en el consultorio me comentan con gran preocupación: “Dr. me salió un espolón ¿Qué es eso? ¿Qué debo hacer?”
El espolón calcáneo es la calcificación de la fascia plantar y de los tendones de los músculos plantares que se insertan en el calcáneo. Esto ocurre como consecuencia de una lesión crónica de estos tejidos.
La secuencia sería la siguiente: la fascia plantar y los mencionados tendones sufren un proceso de sobrecarga mecánica. Así los mismos se lesionan y, como hemos visto en la entrada “¿reparar o no reparar?, ésa es la cuestión”, puede ocurrir que se reparen completamente y el dolor cede o, por diversos motivos, la lesión se vuelve crónica generándose un colágeno de mala calidad. Se genera así una fasciosis plantar (mal llamada “fascitis plantar”) asociada a tendinopatía. Con el tiempo, este tejido estructuralmente alterado y disfuncional podrá calcificarse, dando origen al famoso espolón calcáneo.
Consecuentemente, un tratamiento lógico deberá ser orientado a resolver la sobrecarga mecánica. Esto se puede realizar mediante las siguientes acciones:
Bibliografía
1 - Hansen P y Willick S. Capítulo 39. En Physical Medicine & Rehabilitation. Randall Braddom. 4° Edición. 2011.
2 - Hackett GS. Ligament and Tendon Relaxation Treated by Prolotherapy. 2008